La propuesta de reducir la jornada laboral a 40 horas semanales podría provocar un golpe directo al bolsillo de miles de trabajadores en Quintana Roo, advirtió el senador Eugenio “Gino” Segura. Según el legislador, la medida, aunque bien intencionada, no puede aplicarse de manera inmediata, sobre todo en estados turísticos donde una parte importante de la población depende de propinas.

“En Quintana Roo es muy particular el caso. Muchos viven de lo que ganan día con día, y si les reducen las horas, también se reducen sus ingresos por propinas”, señaló en entrevista. Por eso, respaldó la propuesta de la presidenta Claudia Sheinbaum de hacer la transición de forma gradual, en un plazo de seis años.

Aunque reconoció que una jornada laboral más corta significaría mayor bienestar para los trabajadores, recalcó que la implementación debe hacerse “de la mano con empresarios y trabajadores”, y no de forma apresurada.

En otro tema, el senador fue cuestionado sobre la oposición ciudadana a proyectos polémicos como el desarrollo inmobiliario en Pok Ta Pok, la reactivación del Malecón Tajamar o el cuarto muelle en Cozumel. En estos casos, Segura propuso abrir foros públicos para escuchar tanto a ambientalistas como a empresarios y vecinos.

“Lo importante es recoger opiniones puntuales, no solo guiarse por rumores o intereses. Hay que poner en la balanza los impactos ambientales y los beneficios económicos”, sostuvo.

Mencionó que el pasado sábado sostuvo una reunión con el Consejo Coordinador Empresarial de Cozumel, quienes solicitaron un foro específico para discutir el cuarto muelle. Según el senador, este modelo de participación puede replicarse en todos los proyectos con posturas divididas.

Durante el receso legislativo, Eugenio Segura informó que recorrerá los 11 municipios del estado para dar a conocer los avances logrados desde el Senado. Hasta el momento ya visitó Cancún, Felipe Carrillo Puerto y Cozumel, y aseguró que continuará su gira en los próximos días.