Para 2025, Quintana Roo tendrá una planta de generación de energía a base de gas natural que duplicará su capacidad eléctrica actual, pasando de 300 a 700 megavatios (MW). 

Este proyecto incluye la construcción de dos plantas con capacidad de 200 MW cada una y se encuentra en una fase avanzada de planeación, según Ari Adler Brotman, director del Instituto para el Desarrollo y Financiamiento del Estado (Idefin).

Aunque todavía se evalúa la ubicación definitiva, las autoridades consideran aprovechar terrenos ya impactados, como los que fueron intervenidos por el Tren Maya. “Contamos con tecnología, un grupo inversionista y autorizaciones preliminares para concretar este proyecto sostenible”, afirmó Adler Brotman.

La iniciativa busca atender la creciente demanda de energía en el estado, impulsada por el desarrollo turístico y urbano. Además, su enfoque en gas natural responde a la transición hacia fuentes más limpias, alineadas con objetivos globales de sostenibilidad.

El anuncio oficial se realizará en los próximos meses, pero ya se perfila como un avance clave para mejorar la infraestructura energética de Quintana Roo y fortalecer su competitividad económica.