Docentes y trabajadores de la Escuela Secundaria Técnica 30 “Islas Hermanas Cancún-Mujeres” denunciaron públicamente a la directora del plantel, María de Lourdes Córdova Torres, por presuntas prácticas autoritarias, exclusión laboral y manipulación de plazas directivas, en complicidad con el supervisor de la zona 03, Joaquín Alcalá Cortéz.
Desde su llegada a la institución, Córdova Torres habría provocado un ambiente de división y confrontación, al privilegiar a un pequeño grupo de docentes cercanos a ella y marginar a más del 80% de la plantilla, según el personal inconforme. En un documento dirigido a los Servicios Educativos de Quintana Roo, los trabajadores acusaron que la directora ignoró los acuerdos establecidos con la autoridad jurídica de la SEQ para garantizar la convivencia laboral.
Lejos de acatar dichos acuerdos, la directora —señalaron— rechazó en múltiples ocasiones reunirse con la base trabajadora y mantuvo una actitud evasiva para evitar cualquier acercamiento.
La situación escaló cuando, aprovechando un paro laboral del personal, Córdova Torres y Alcalá Cortéz emitieron una convocatoria «exprés» para cubrir espacios de subdirección en la Técnica 30 de la Zona Continental de Isla Mujeres. La convocatoria incluyó requisitos cuestionables, como exigir 10 años de antigüedad en la institución, cuando la normativa oficial marca un mínimo de 4 años según el artículo 10 de la convocatoria 2025 de USICAMM.
Además, la convocatoria fue publicada con menos de 48 horas de margen, dirigida exclusivamente a docentes cercanos a ambos funcionarios, dejando fuera al grueso del personal.
Trabajadores denunciaron que estos movimientos se negociaron “bajo lo oscurito” y señalaron que los dos puestos ofertados ya estaban comprometidos antes de publicarse la convocatoria, simulando un proceso transparente para cubrir las apariencias.
“¿Dónde quedó la escuela que trabajaba en conjunto? ¿Dónde está esa escuela humanista?”, cuestionaron en el comunicado, donde también responsabilizaron a la directora y al supervisor por la inestabilidad y clima de tensión que prevalece en la Técnica 30.
El personal advirtió que cualquier represalia derivada de estas denuncias será responsabilidad directa de Córdova Torres y Alcalá Cortéz, pues aseguraron que sus acciones han fracturado la convivencia escolar y afectado incluso a los estudiantes, quienes han percibido los conflictos internos.